Hemos asistido a la proyección del corto "Binta y la gran idea" y el largometraje "Un novio para Yasmina" dentro de la programación del festival sobre la multiculturalidad, Divercinema.
Utilizando el cine como estrategia didáctica el festival pretende fomentar la mirada intercultural y ofrecer elementos de análisis a través de la imagen, que nos permitan conocer otras realidades desde una visión más justa. 
El primer corto de
Javier Fesser supone un canto a la imaginación por encima de las dificultades, una parábola del
poder llegar a ser por encima del tener. Pero no nos olvidemos que la situación para los niños en cualquier pueblo de África no es fácil. El film aborda el conflicto desde una perspectiva positiva y con esperanza, con la mirada peculiar de un director que sabe observar y contar historias de vida.
El largo "Un novio para Yasmina"
(ópera prima de la directora Irene Cardona) es un más que dignísimo filme,
estrenado en el Festival de Málaga de este año y triplemente premiado (
Biznaga de plata a la mejor película, premio del público, y premio a la mejor actriz) con un elenco de notables actores. Yasmina es joven, inteligente, guapa, tiene todos los factores para hacer lo que se proponga con su vida, salvo un escollo: conseguir los papeles que le permitan residir en España. Otras vidas se cruzarán con la suya, otras historias cargadas de complejidad y realismo. Un relato
costumbrista narrado sin maniqueísmos y sin perfiles planos porque la realidad supera, cada vez más, la ficción.
Dos propuestas interesantes en la acertada programación de Divercinema.
